de palabras de mirares y de amor
la sed que nunca saciaré
que saciarla es imposible
de eso vivo
de la sed.
esta escena nocturna
la cual es dominada por el estruendo no tan estruendo de la lluvia,
me mueve a la pureza agonizante de saber
saberte a tí mi amor
y saber la vida
la tierra y los olores
las plantas y las mentes que me seducen
que aumentan la sed,
la sed.
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